Mientras espero en la cola, mi imaginación avanza muchísimo más rápido que mis pies y por unos instantes creo que me voy a descoyuntar. Compruebo de nuevo el interior de mi mochila: herramientas, víveres, una linterna, el plano y mi libro desgastado por tantas lecturas. Cuando llega mi turno para comprar el billete, me tiembla todo el cuerpo. Y apenas puedo respirar al subir al vagón. Por fin, tras unos vigorosos e intermitentes pitidos, las puertas se cierran solas y el metro empieza a deslizarse lentamente sobre las vías. Mi particular «Viaje al centro de la Tierra» acaba de comenzar.
Finalista en el XI Concurso de Microrrelatos «Los relatos viajan en Metro». Red de Bibliotecas Públicas de Madrid.
4 ideas sobre “CIENCIA Y FICCIÓN”
Enhorabuena!
Vas a todo gas …
Me ha encantado .
Directa a las Antípodas por el camino más corto. Ya veremos si sobrevivo al intento.
Gracias, Eva.
Enhorabuena por el resultado! A mí me resultaría imposible condensar una historia en tan pocas palabras.
En cuestiones de ficción, nada es imposible.
Gracias por viajar hasta aquí, Guillermo.