Odio la Navidad. Y a mi madre. Sí, a mi madre también. Y es que se empeña en que sea feliz todo el rato, incluso cuando estoy resfriada. Me repite machacona que tengo que ser buena, o al menos parecerlo. Llegar a algo en la vida,
Primer premio
Don Julián era un hombre flaco como un lápiz y tan alto que parecía que podía tocar la luna con tan solo ponerse de puntillas y alzar el brazo lo que le obligaba a andar desgarbado ya que tenía que hacer auténticos esfuerzos para mantener el equilibrio.
Nuestras miradas se enredaron en el espejo de una cafetería en la que nos citó el azar. Yo acababa de llegar y ella estaba a punto de irse. Nos examinamos furtivamente, con tímida desvergüenza, durante unos instantes que fueron eternos y antes de que ella saliese por la puerta yo […]
En el primer capítulo Ella aparece garabateando sobre un papel manchado de harina mientras el guiso borbotea en el fuego. Él la sorprende al final del tercer capítulo.
Los Alberola somos una familia unida. Aunque en estos tiempos, ya se sabe, todos andamos muy liados. Eso sí, cuando un Alberola muere, ninguno falta al sepelio.
«Brecha» y «Salarial» se sientan en el banquillo acusadas de asociación ilícita. Expertos en la materia testifican sobre su injustificado comportamiento.
Ana termina de leer el cuento de Cenicienta y lo arroja al agua. Su madre, que hace visera con la mano desde la toalla y no la pierde de vista, finge que no se da cuenta. Piensa en su marido, en la cantidad de horas que pasa en la oficina […]