Gracias a papá he sacado un 6 en matemáticas. Cuando llega de trabajar, se sienta conmigo a hacer los deberes. Antes se le daban muy mal las restas llevando, pero ha mejorado mucho. La maestra me ha escrito una nota en la que dice que progreso adecuadamente y que, si sigo así, llegaré a algo en la vida. Cuando papá la lee, se pone a llorar de emoción. Está tan motivado que le oigo repetir las tablas de multiplicar en la cama mientras yo juego a la videoconsola. Si sigue esforzándose así, este año paso de curso seguro.
Finalista en el X Certamen de microrrelatos Ateneo de Mairena.
4 ideas sobre “RESTAR”
Excelente Margarita, pero eso no es nuevo!! Felicidades.
Besicos muchos.
Cada una de tus generosas lecturas sí es nueva, Nani, y muy gratificante.
Un beso grande y mil gracias.
¿Es metáfora o es realidad? A veces, ambas circunstancias no se pueden diferenciar.
Es un padre abnegado. O algo similar. Parece que entre «símiles» anda la cosa.